LLAMADO A FUNDAR LA V INTERNACIONAL
Vladimir Lazo García
El día viernes 20 de noviembre el presidente Chávez llamó a fundar la V Internacional.
Según su exposición de motivos, los tiempos están maduros para su creación, algo en lo que todos los que estamos en el bando revolucionario creemos cierto.
La madurez de los tiempos significa algo que se viene mostrando en la teoría del marxismo desde la década de los años sesenta, es decir, que la clase obrera es mucho más extensa y grande que lo que supondría la idea del proletariado clásico.
En ella es necesario incluir a todos los trabajadores asalariados en todas las sociedades: a todo trabajador excluido de la propiedad de las condiciones objetivas del trabajo, o sea, de la posesión de capitales; que es la extragrande mayoría de la población mundial que trabaja por un salario.
Esa es la población que puede perfectamente comprender la madurez de los tiempos para fundar la V Internacional, con la condición de un programa mínimo para la conquista del poder del Estado para tomar las riendas de la producción de la riqueza y de su distribución, e impone tal maduración, para nosotros, la obligación de su fundación.
Para que sea internacional, la V, debe haber conciencia en todos los partidos y pueblos que la conformarían, de que se trata de una alianza mundial de clases trabajadoras, bajo las premisas anteriores y otras que por razones de espacio no he expuesto, y en consecuencia, no sólo de agrupaciones con vagas intenciones “socialistas”, de reacomodar la sociedad capitalista para que el capitalismo siga existiendo como hasta ahora, con algunos retoques, en una operación gatopardiana:
Hacer cambios “humanitarios”, dentro del sistema de relaciones sociales de producción en beneficio de algunos sectores de la población, pero con las industrias, el comercio y los bancos en manos de los capitalistas antiguos o nuevos, que para los efectos da lo mismo.
Debe ser, en primer lugar, una unión de trabajadores y pueblos con militancia antiimperialistas, pues, desde hace ya muchos años, sabemos, que el enemigo número uno de la humanidad es el capitalismo en su desarrollo imperialista, algo no sólo sabido, sino también expuesto dentro de la tradición del marxismo militante y en el poder, recordar a Lenín y a Luxenburgo.
Por lo tanto, un requisito básico para la constitución de la V Internacional es que el objetivo de todas nuestras luchas sea el de producir verdaderas transformaciones revolucionarias que llevan a construir sociedades sin clases.
Vladimir Lazo García
El día viernes 20 de noviembre el presidente Chávez llamó a fundar la V Internacional.
Según su exposición de motivos, los tiempos están maduros para su creación, algo en lo que todos los que estamos en el bando revolucionario creemos cierto.
La madurez de los tiempos significa algo que se viene mostrando en la teoría del marxismo desde la década de los años sesenta, es decir, que la clase obrera es mucho más extensa y grande que lo que supondría la idea del proletariado clásico.
En ella es necesario incluir a todos los trabajadores asalariados en todas las sociedades: a todo trabajador excluido de la propiedad de las condiciones objetivas del trabajo, o sea, de la posesión de capitales; que es la extragrande mayoría de la población mundial que trabaja por un salario.
Esa es la población que puede perfectamente comprender la madurez de los tiempos para fundar la V Internacional, con la condición de un programa mínimo para la conquista del poder del Estado para tomar las riendas de la producción de la riqueza y de su distribución, e impone tal maduración, para nosotros, la obligación de su fundación.
Para que sea internacional, la V, debe haber conciencia en todos los partidos y pueblos que la conformarían, de que se trata de una alianza mundial de clases trabajadoras, bajo las premisas anteriores y otras que por razones de espacio no he expuesto, y en consecuencia, no sólo de agrupaciones con vagas intenciones “socialistas”, de reacomodar la sociedad capitalista para que el capitalismo siga existiendo como hasta ahora, con algunos retoques, en una operación gatopardiana:
Hacer cambios “humanitarios”, dentro del sistema de relaciones sociales de producción en beneficio de algunos sectores de la población, pero con las industrias, el comercio y los bancos en manos de los capitalistas antiguos o nuevos, que para los efectos da lo mismo.
Debe ser, en primer lugar, una unión de trabajadores y pueblos con militancia antiimperialistas, pues, desde hace ya muchos años, sabemos, que el enemigo número uno de la humanidad es el capitalismo en su desarrollo imperialista, algo no sólo sabido, sino también expuesto dentro de la tradición del marxismo militante y en el poder, recordar a Lenín y a Luxenburgo.
Por lo tanto, un requisito básico para la constitución de la V Internacional es que el objetivo de todas nuestras luchas sea el de producir verdaderas transformaciones revolucionarias que llevan a construir sociedades sin clases.
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