Rol y ética del militante socialista
Por: Macario Sandoval (*)
El PSUV, debe ser un partido revolucionario, basado en los principio de la ética Socialista, donde su misión es buscar en todos sus actos la inclusión y la solidaridad para con los millones de seres de la Patria de Bolívar y más allá de ésta, requieran en cualquier circunstancia la mano extendida del Partido Socialista Unido de Venezuela.
Para ello como lo reflexiona el Líder surgido del dolor de los de abajo Hugo Chávez Frías:-“Todos y todas las militantes deben ser ejemplo de conciencia y para tener conciencia necesario es el conocimiento”. En razón a que el conocimiento es la herramienta que fragua o moldea la conciencia de los pueblos; y si el pueblo que milita en el partido Socialista Unido se apropia de la teoría revolucionaria y la pone en práctica, entonces seguro estamos que habrá consolidación de la revolución Bolivariana al hacer cierta todos los días la máxima del ideólogo del proceso:-“la igualdad aspirada a establecer debe ser practicada” y esto solo es posible en la concreción del Socialismo Bolivariano.
La vanguardia del PSUV, tiene que ser perseverante, combativa, estudiosa, pero al mismo tiempo humilde capaz de ganarse el aprecio y amor de la militancia y del pueblo en general; seres de carne y hueso que vibren de indignación ante cualquier injusticia cometida contra cualquier ser humano en cualquier parte, que sepan y tengan en cuenta que ese rol no da privilegios más allá de ser conductores circunstanciales de un proceso que busca la felicidad de grandes mayorías que por siglos han estado bajo la exclusión y explotación de unos pocos que llegaron a erigirse como dueños y señores de una Patria que fue creada por el ejército que condujo el liberador y alfarero de Repúblicas.
La dirigencia del PSUV, inspirada en el legado que irradia y ponen en práctica el máximo líder debe estar orientada por la verdad y la justicia en todos y cada uno de sus actos públicos o privados, la equidad debe estar presente en su accionar, desprendiéndose de privilegios que pudieran devenir de tal status, y por el contrario dar ejemplo con el sacrificio que hubiere de hacer en caso que la circunstancia así lo exigiere.
En tal sentido se debe establecer en los estatutos que queda vedado a los dirigentes y gobernantes del PSUV mezclarse en asuntos de negocios del Estado en todos sus niveles por ser contrario a la Probidad Socialista y muy particularmente al ejemplo que nos lego el siempre ético Bolívar, quien se negó en todo momento a ser o usar el poder para su propio beneficio.
El nepotismo debe ser borrado de toda gestión tanto política como administrativa tanto en el seno del PSUV como del mismísimo gobierno en razón a que de esa práctica aberrante se alimenta la corrupción de toda índole, no es correcto confundir la cosa pública con lo privado y viceversa, ya que ello es contrario a La moral que predico y puso en práctica El Libertador, esencia y raíz de donde surge la inspiración para la construcción cotidiana de la ética Socialista Bolivariana.
(*) Delegado ante El I Primer Congreso Extraordinario del PSUV.
Por: Macario Sandoval (*)
El PSUV, debe ser un partido revolucionario, basado en los principio de la ética Socialista, donde su misión es buscar en todos sus actos la inclusión y la solidaridad para con los millones de seres de la Patria de Bolívar y más allá de ésta, requieran en cualquier circunstancia la mano extendida del Partido Socialista Unido de Venezuela.
Para ello como lo reflexiona el Líder surgido del dolor de los de abajo Hugo Chávez Frías:-“Todos y todas las militantes deben ser ejemplo de conciencia y para tener conciencia necesario es el conocimiento”. En razón a que el conocimiento es la herramienta que fragua o moldea la conciencia de los pueblos; y si el pueblo que milita en el partido Socialista Unido se apropia de la teoría revolucionaria y la pone en práctica, entonces seguro estamos que habrá consolidación de la revolución Bolivariana al hacer cierta todos los días la máxima del ideólogo del proceso:-“la igualdad aspirada a establecer debe ser practicada” y esto solo es posible en la concreción del Socialismo Bolivariano.
La vanguardia del PSUV, tiene que ser perseverante, combativa, estudiosa, pero al mismo tiempo humilde capaz de ganarse el aprecio y amor de la militancia y del pueblo en general; seres de carne y hueso que vibren de indignación ante cualquier injusticia cometida contra cualquier ser humano en cualquier parte, que sepan y tengan en cuenta que ese rol no da privilegios más allá de ser conductores circunstanciales de un proceso que busca la felicidad de grandes mayorías que por siglos han estado bajo la exclusión y explotación de unos pocos que llegaron a erigirse como dueños y señores de una Patria que fue creada por el ejército que condujo el liberador y alfarero de Repúblicas.
La dirigencia del PSUV, inspirada en el legado que irradia y ponen en práctica el máximo líder debe estar orientada por la verdad y la justicia en todos y cada uno de sus actos públicos o privados, la equidad debe estar presente en su accionar, desprendiéndose de privilegios que pudieran devenir de tal status, y por el contrario dar ejemplo con el sacrificio que hubiere de hacer en caso que la circunstancia así lo exigiere.
En tal sentido se debe establecer en los estatutos que queda vedado a los dirigentes y gobernantes del PSUV mezclarse en asuntos de negocios del Estado en todos sus niveles por ser contrario a la Probidad Socialista y muy particularmente al ejemplo que nos lego el siempre ético Bolívar, quien se negó en todo momento a ser o usar el poder para su propio beneficio.
El nepotismo debe ser borrado de toda gestión tanto política como administrativa tanto en el seno del PSUV como del mismísimo gobierno en razón a que de esa práctica aberrante se alimenta la corrupción de toda índole, no es correcto confundir la cosa pública con lo privado y viceversa, ya que ello es contrario a La moral que predico y puso en práctica El Libertador, esencia y raíz de donde surge la inspiración para la construcción cotidiana de la ética Socialista Bolivariana.
(*) Delegado ante El I Primer Congreso Extraordinario del PSUV.
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