En nuestra patria existe una juventud descendiente de padres disociados que pertenecieron a los Gobiernos de la IV República, dicha juventud desconoce el vergonzoso proceder de sus progenitores cuando ocuparon cargos en esos Gobiernos.
Esos funcionarios carecían de sensibilidad humana, quienes atropellaron y maltrataron a nuestros conciudadanos para así cumplir órdenes de sus superiores, porque la consigna era detener el avance de quienes luchaban por las reivindicaciones de su pueblo a costo de cualquier sacrificio, claro ellos siempre pensaron en si mismos, en sus propios beneficios, jamás sus intenciones fueron ayudar al desposeído, al pobre, a los excluidos, a los que ellos sabían que se les negaba todos sus derechos.
Hay otra juventud, hija de mártires que fueron torturados y asesinados por los gobiernos de Acción Democrática y COPEI, solo por defender los derechos ciudadanos, ya que esos regímenes solo gobernaban para proteger los intereses de la Oligarquía y del Imperialismo Yanqui que como sabemos eran los verdaderos amos de nuestra Venezuela, pues todos los gobernantes sin excepción les rendían pleitesía.
Cuantos dirigentes revolucionarios dieron su vida en busca de la felicidad de su pueblo, cuantos mártires como Fabricio Ojeda que renunció a su curul en el Congreso de la republica para luego incorporarse al frente de la lucha revolucionaria con fusil en mano en las montañas de la patria para ser mas tarde detenido, encarcelado y luego asesinado en los calabozos del DIM, silenciando una de la voces que denunciaba de esta forma las verdaderas patrañas en que se consumía la nación.
Livia Gouverneur, estudiante de la Universidad Central de Venezuela dirigente de la Juventud del partido Comunista de Venezuela, pagó con su vida el derecho de la libertad al enfrentar sin ningún tipo de arma a los esbirros de la DIGEPOL, policía política de Rómulo Betancourt, quien ordenó “disparen primero y averigüen después”, fórmula utilizada en otros países de nuestra América, que también luchaban por recuperar la dignidad de sus pueblos vendida al coloso del Norte.
Donato Carmona, dirigente trabajador del campo fue detenido por su lucha en defensa de la clase campesina a quien le exigieron cavar su fosa cuando iban ajusticiar y valientemente les dijo a sus asesinos, “cávenla ustedes que yo solo trabajo gratis para el partido Comunista de Venezuela”, los cual les hizo cambiar de opinión para luego montarlo al avión y lanzarlo al mar.
Profesor Alberto Lovera miembro del Partido Comunista de Venezuela lo lanzaron al mar colgándole al cuello una cadena con ancla de hierro para que no flotara a la superficie, pero como no hay crimen perfecto las olas marinas lo arrastraron a las playas de lechería en el Estado Anzoátegui.
Al dirigente Víctor Soto Rojas del MIR. quien también corrió la misma suerte de los otros camaradas de ser lanzado desde un helicóptero.
Profesor Jorge Rodríguez, secretario general del partido Liga Socialista quien fue detenido y encarcelado en los calabozos de la DIGEPOL siendo sometido a horrendas torturas por dichos funcionarios quienes les desprendieron el hígado y otros órganos vitales causándole la muerte.
Todos estos crímenes quedaron impunes los desaparecidos hermanos Pasquier y tantos miles de muertos y desaparecidos que no tendrían espacio en esta columna para nombrarlos. Fueron asesinados por los mismos grupos carniceros de la IV Republica que todavía pululan en el suelo patrio en donde se derramó tanta sangre de estos mártires que todavía están frescas en la memoria de nuestro pueblo.
Hoy estos patriotas de última hora no se pronunciaron para entonces con una sola protesta en defensa de los asesinados y desaparecidos, sino por el contrario callaron para ocultar esos crímenes.
Es bueno que esta juventud que hoy se levanta, se entere de los crímenes de los gobiernos de la IV Republica que no tiene parangón con los diez años de revolución del comandante Hugo Rafael Chávez Frías el cual se ha caracterizado en darle, paz, justicia y libertad a todos los rincones de la patria y planteando el mayor esfuerzo para que mas nunca se vuelvan a repetir en nuestro país esos crímenes. Ya este pueblo despertó y a estos “bacalaos” los tiene identificados, por lo tanto mas nunca volverán.
Patria Socialismo o Muerte; Venceremos
Esos funcionarios carecían de sensibilidad humana, quienes atropellaron y maltrataron a nuestros conciudadanos para así cumplir órdenes de sus superiores, porque la consigna era detener el avance de quienes luchaban por las reivindicaciones de su pueblo a costo de cualquier sacrificio, claro ellos siempre pensaron en si mismos, en sus propios beneficios, jamás sus intenciones fueron ayudar al desposeído, al pobre, a los excluidos, a los que ellos sabían que se les negaba todos sus derechos.
Hay otra juventud, hija de mártires que fueron torturados y asesinados por los gobiernos de Acción Democrática y COPEI, solo por defender los derechos ciudadanos, ya que esos regímenes solo gobernaban para proteger los intereses de la Oligarquía y del Imperialismo Yanqui que como sabemos eran los verdaderos amos de nuestra Venezuela, pues todos los gobernantes sin excepción les rendían pleitesía.
Cuantos dirigentes revolucionarios dieron su vida en busca de la felicidad de su pueblo, cuantos mártires como Fabricio Ojeda que renunció a su curul en el Congreso de la republica para luego incorporarse al frente de la lucha revolucionaria con fusil en mano en las montañas de la patria para ser mas tarde detenido, encarcelado y luego asesinado en los calabozos del DIM, silenciando una de la voces que denunciaba de esta forma las verdaderas patrañas en que se consumía la nación.
Livia Gouverneur, estudiante de la Universidad Central de Venezuela dirigente de la Juventud del partido Comunista de Venezuela, pagó con su vida el derecho de la libertad al enfrentar sin ningún tipo de arma a los esbirros de la DIGEPOL, policía política de Rómulo Betancourt, quien ordenó “disparen primero y averigüen después”, fórmula utilizada en otros países de nuestra América, que también luchaban por recuperar la dignidad de sus pueblos vendida al coloso del Norte.
Donato Carmona, dirigente trabajador del campo fue detenido por su lucha en defensa de la clase campesina a quien le exigieron cavar su fosa cuando iban ajusticiar y valientemente les dijo a sus asesinos, “cávenla ustedes que yo solo trabajo gratis para el partido Comunista de Venezuela”, los cual les hizo cambiar de opinión para luego montarlo al avión y lanzarlo al mar.
Profesor Alberto Lovera miembro del Partido Comunista de Venezuela lo lanzaron al mar colgándole al cuello una cadena con ancla de hierro para que no flotara a la superficie, pero como no hay crimen perfecto las olas marinas lo arrastraron a las playas de lechería en el Estado Anzoátegui.
Al dirigente Víctor Soto Rojas del MIR. quien también corrió la misma suerte de los otros camaradas de ser lanzado desde un helicóptero.
Profesor Jorge Rodríguez, secretario general del partido Liga Socialista quien fue detenido y encarcelado en los calabozos de la DIGEPOL siendo sometido a horrendas torturas por dichos funcionarios quienes les desprendieron el hígado y otros órganos vitales causándole la muerte.
Todos estos crímenes quedaron impunes los desaparecidos hermanos Pasquier y tantos miles de muertos y desaparecidos que no tendrían espacio en esta columna para nombrarlos. Fueron asesinados por los mismos grupos carniceros de la IV Republica que todavía pululan en el suelo patrio en donde se derramó tanta sangre de estos mártires que todavía están frescas en la memoria de nuestro pueblo.
Hoy estos patriotas de última hora no se pronunciaron para entonces con una sola protesta en defensa de los asesinados y desaparecidos, sino por el contrario callaron para ocultar esos crímenes.
Es bueno que esta juventud que hoy se levanta, se entere de los crímenes de los gobiernos de la IV Republica que no tiene parangón con los diez años de revolución del comandante Hugo Rafael Chávez Frías el cual se ha caracterizado en darle, paz, justicia y libertad a todos los rincones de la patria y planteando el mayor esfuerzo para que mas nunca se vuelvan a repetir en nuestro país esos crímenes. Ya este pueblo despertó y a estos “bacalaos” los tiene identificados, por lo tanto mas nunca volverán.
Patria Socialismo o Muerte; Venceremos
Juan Rafael Rángel
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