Ahora, organización y conciencia

Ahora, organización y conciencia
Escrito por DIARIO VEA
Después de la extraordinaria demostración de fuerza durante la marcha del 12 de febrero y de la fundación de la unión de las juventudes revolucionarias contra el fascismo, bajo el patrocinio del Presidente Chávez, al movimiento juvenil bolivariano nada le hace falta para desempeñar su rol de vanguardia.
Como dijera Chávez, nunca hubo una oportunidad mejor para los jóvenes ahora en el marco de la revolución bolivariana en marcha hacia el socialismo del siglo XXI.
Nada puede estar más asociado al espíritu y las expectativas de la juventud que la empresa de romper las cadenas del pasado, de la subordinación al bastón de mando del imperialismo, de la distribución injusta de la riqueza que permite el trasiego de la renta petrolera a las cuentas bancarias de la burguesía, del atraso impuesto por el dominio de los terratenientes y de una vida pública sometida a los gobiernos de la partidocracia adeco-copeyana, sólo ávidos de llenarse los bolsillos y servir a los intereses de la oligarquía, y en su lugar establecer una sociedad justa, profunda y realmente democrática y liberada de la pobreza y la explotación.
A la juventud le corresponde ser la vanguardia de la lucha por la democracia socialista del siglo XXI. Ella debe ocupar las primeras posiciones en la lucha contra las bandas fascistas. Bajo el mando directo de Chávez, la juventud bolivariana está obligada a ser audaz y combativa en la lucha por impedir que los fascistas ocupen las calles e intenten las recetas desestabilizadoras de Washington.
Ahora, el llamado es a la organización y a la conciencia revolucionarias. Organización para que la unión de las juventudes establezca su base en cada liceo, en cada escuela universitaria, en cada rincón de los barrios, en cada empresa. Allí donde están los jóvenes debe fundarse una organización de la unidad juvenil. Organización y más organización porque sólo mediante ésta podrá ocuparse el rol de vanguardia.
Conciencia para armarse de la ideología revolucionaria y llevar adelante la batalla de las ideas a fin de derrotar la inquisición del siglo XXI, representada en las bandas fascistas que hoy amenazan la independencia y la paz de la República.