La oposición en su laberinto

La oposición en su laberinto
Escrito por DIARIO VEA
A la oposición la unifica el odio a Chávez y su contradicción absoluta y antagónica con los objetivos libertadores del proceso bolivariano.

Fuera de tales parámetros, la oposición es un mundo carcomido por la falta de principios y ética, anárquico, fragmentado, donde se agrupan desde fascistas a quienes sólo alienta el apetito por una revancha sangrienta, hasta ambiciosos pragmáticos que buscan tener el control de la industria petrolera para lucrarse mediante su venta a intereses extranjeros.

Las primarias de la oposición revelaron el submundo de los conflictos personalistas y la pugna entre fracciones menudas que asumen la política como una rebatiña entre forajidos. Salvo volver al pasado, a los tiempos de la subordinación al bastón de mando imperial y a complacer a los grandes empresarios, la oposición no tiene un proyecto para el presente y futuro del país, a menos que consideremos como tal los decretos y el terror desatados por el golpe del 11 de abril de 2002.

Después de las primarias, la oposición mostró su verdadero perfil. Denuncias sobre las maniobras de Acción Democrática para imponer sus candidatos. Lucha a muerte en el desgastado COPEI. Exclusión con zancadillas de liderazgos regionales y de pequeñas tiendas políticas. Pugnas por la distribución del subsidio estadounidense. Detrás de ese mundo de intrigas y forcejeos está la pelea por la candidatura presidencial. Hasta ahora más de 27 precandidatos afilan sus espadas, desde repetitivos como Salas Römer y Eduardo Fernández hasta nuevos aspirantes como Marcel Granier, Alberto Federico Ravell y el “Mata curas” de Globovisión.

Ese panorama de revanchas y viaje al pasado, de competencia por quién entrega más a Estados Unidos, de forajidos fascistas y curas pervertidos, es el que espera a Venezuela si la oposición logra implantar en la próxima Asamblea Nacional el laberinto del modelo hondureño